Paso 1: Recoger del contenedor de cartón tubos de pieles del mismo diámetro.
Los usaremos como parte delantera de la moto y manillar.
Paso 2: Comprar en cualquier chino "espaguetis" para piscina. Los usaremos como ruedas. También se compran las tapaderas de cocina que harán la función de llantas.
Paso 3: Reciclar cantaras de lejía. Tunearlas un poco para darle un color personalizado a nuestro deposito de gasolina.
Paso 4: Comenzar a montar la estructura de la moto con los materiales arriba detallados.
Paso 5: Colocar embudo haciendo la función de foco de luz de la "chopper"
Paso 6: Colocar una luz LED dentro del embudo que hará que nuestra moto tenga luz suficiente como para deslumbrar a mas de uno/una.
Paso 7: Con canutos reciclados de los hilos hacemos que nuestro manillar se alargue. También usamos cucharas como espejos retrovisores. La función de intermitentes la realiza perfectamente una pelota de tenis partida por la mitad.
Como cuentakilómetros, lata de la piara.
Como visera para tapar el viento, peinetas de flamencas.
Para las matrículas usamos bandejas de dulces y una plantilla homologada para pasar la ITV.
El resultado final fue el siguiente...
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